QUINCE
AÑOS
Calendario,
déjame dar marcha atrás
a
esa rueda que tú giras a diario,
que
otra vez con la memoria recupere
mi
guitarra y mi canción de los quince años.
¡Que
era verde la esperanza,
sonrosada
la ilusión,
de
color azul la vida,
rojo
y blanco el corazón!
Déjame
en aquella fecha soleada
de
una tarde de merienda en el verano:
chicos,
chicas, pubertad con espinillas,
a
una fiesta con manteles en el campo.
¡En
la guitarra seis cuerdas,
dos
chispas en la mirada
y
un corazón en un árbol
con
una flecha clavada!
El
frescor de aquella fuente en la penumbra,
las
canciones en el Valle de Santiago,
las
miradas,-chicos, chicas-a hurtadillas,
la
locura almibarada del flechazo.
¡Y
una ninfa entre la fuente
y
el amor recién nacido
y
entre la umbría las flechas
de
la aljaba de Cupido!
Sobre
aquellos quince abriles, otros quince
hemos
ido grano a grano madurando;
lentamente
se cocieron esos mostos
y
hoy tenemos ya solera y vino rancio.
¡Y
la sangre más cuajada,
sazonada
la razón,
plumas
viejas en las alas
y
más duro el corazón!
Pero
aún quedan al recuerdo efervescente
las
burbujas de aquel cava tan dorado
y
desgrana sobre el alma sus acordes
la
guitarra que trovara mis quince años.
¡Y
un brochazo de nostalgia
perfilando
aquel ayer:
tortilla
y sol de una tarde
que
ya nunca va a volver!
I.S.B.N.84-398-8126-6
Depósito
Legal: VA-605-86
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