LAS
MULAS
Naranja,
Cordobés, Revoltosa, Campesina,
Preciosa,
Tirolés, Cartujana, Molinero...
...Encima
del pesebre leemos estos nombres...
Son
letras con historia...Cabalgan sobre el tiempo
que
fue aventando huellas de cascos y herraduras,
que
fue olvidando coplas escritas en el viento.
Arados
ancestrales, rumor de cascabeles...
Sus
gentes, con arrugas sembradas de silencio,
son
fósiles que viven en nuevas estructuras,
pero
hablan de vivencias que llaman sus recuerdos.
Naranja,
Cordobés, Revoltosa, Campesina,
Preciosa,
Tirolés, Cartujana, Molinero...
...Mulillas
en parejas, trabadas por el yugo,
regaron
con sudores los valles y cabezos...
¡Velaron
ya los buitres su muerte prematura,
o
fueron la cecina de oscuro saladero!
El
tosco arado duerme, con tamo , sobre el muro;
la
barca de los trillos, varada en dique seco...
Son
todos los aperos : paisaje sin figuras,
retrato
abarquillado de ayer amarillento.
Naranja,
Cordobés, Revoltosa, Campesina,
Preciosa,
Tirolés, Cartujana, Molinero...
...No
se oye sobre el valle, con áspero chasquido,
la
tralla dictadora que usaban los arrieros,
ni
embriagan con su vaho, mojado y penetrante,
las
cuadras del antaño, la cuadras de mi pueblo.
Y
el hombre que tras ellas quebraba los terrones,
cantando
al aire coplas, rimando surco y verso,
aún
lleva boina,- blanca del polvo de su tierra-
y
el alma blanca,- negra de estéril sufrimiento-.
Naranja,
Cordobés, Revoltosa, Campesina,
Preciosa,
Tirolés, Cartujana, Molinero...
...Llegaron
los colosos al pueblo, de improviso...
Sus
patas son de goma, sus tripas son de hierro.
-Son
machos sin ramales, sin hambres ni pesebres
y
brillan en sus lomos apodos extranjeros-.
La
mulas les miraban moviendo las orejas,
también
se movió un poco la testa del mulero...
...Y
luego puso el doble de paja en los pesebres,
que
pronto se llenaron de ollares y de belfos...
...Las
fue atusando a todas la felpa de la cara,
heridas
sus entrañas por cruel presentimiento.
Naranja,
Cordobés, Revoltosa, Campesina,
Preciosa,
Tirolés, Cartujana, Molinero...
...Las
letras, bien visibles, escritas en la cuadra,
nos
hablan de las mulas que ya se nos murieron...
Y
el hombre que al arado y al carro las uncía,
el
ser enamorado del surco bien derecho,
experto
en los ramales, el “güesque, so” y el “arre”,
la
garia, el aricar, el rastrillo, los arreos,
quedóse
marginado en la nueva agricultura.
Sin
mulas y sin cuadras: llorando su destierro...
Naranja,
Cordobés, Revoltosa, Campesina,
Preciosa,
Tirolés, Cartujana, Molinero...
Los
nombres entrañables que lucen los pesebres,
¡a
fuego sobre el alma los llevan los muleros!
I.S.B.N.84-398-8126-6
Depósito
Legal: VA-605-86